Fiestas de la Blanca, algo más que unas fiestas.

Hace dos días acabaron las fiestas de Vitoria, una de las más importantes del País Vasco.
Comienzan el día 4 de agosto a las seis de la tarde con la bajada de Celedón, personaje que con su llegada, bajando del cielo con un paraguas, abre las fiestas patronales de Vitoria y da lugar al chupinazo. Es tradición, una vez que haya bajado Celedón, encender un puro y ponerte el pañuelo típico al cuello.
Aunque en realidad las fiestas están dedicadas a la Virgen Blanca, cuyo día es el 5 de agosto y esa misma mañana los blusas, que son miembros de diferentes cuadrillas, van a darle flores a la Virgen Blanca (la ofrenda floral). Ellos y sus cuadrillas son una de las cosas más destacadas de todas las fiestas, ya que cada día hacen paseíllos en los que la gente les ve y es algo normal que te peguen pegatinas de sus cuadrillas. Algunos años atrás las cuadrillas eran únicamente de hombres pero en la actualidad también hay muchas mujeres que se unen a ellas para poder disfrutar todos juntos de las fiestas.
A partir del cinco de agosto es normal ver por Vitoria a la gente vestida con los trajes típicos. En hombres es el de blusa, que tiene bastantes variantes en lo que cambia los colores de las chaquetas y las chicas van vestidas de neskas (que significa chica en euskera), que es el original de Vitoria, aunque las jóvenes suelen optar por vestirse de arrantzales (pescadoras en euskera) debido a que es un traje mucho más cómodo y al que se le puede dar más trote.

Mis amigas y yo vestidas de arrantzales y con los dos pañuelos típicos: el rojo y el azul de cuadros.

Otra de las cosas que se suele hacer en fiestas es ir a ver las vaquillas en la plaza de toros Iradier a las 10:30 de la mañana, todos los días, en la que muchos jóvenes van sin dormir y por eso a veces ocurren cogidas inesperadas de las vaquillas.

Celedón y Neska txikis en la plaza de España.

Las fiestas de Vitoria no son unas fiestas en la que sólo los adultos pueden disfrutar, los niños también se lo pueden pasar en grande. El día 7 de agosto baja el Celedón pequeño para que los niños puedan vivir su minichupinazo. Y durante todas las fiestas tienen sitios dedicados solamente para ellos, como el "Espacio Aventura" en el parque del Prado.

Durante las fiestas hay orquestas, pasacalles, rincones del humor (este año contamos con la presencia del humorista Dani Mateo), conciertos...para que todo el mundo pueda disfrutar de las fiestas de las maneras que más le gusta. Este año cabe destacar los conciertos de Efecto Pasillo y Bongo Botrako entre otros en la plaza de Fueros. Además en el recinto de Mendizabala ponen muchas barracas y puestos de comida para que se pueda hacer cosas distintas, aunque la feria de Mendizabala abre sus puertas el día de Santiago para que la gente pueda disfrutar durante todos los días.

Subida de Celedón a la 1de la mañana.

Tras muchos días de fiesta, bailar, beber....las fiestas de La Blanca terminan la noche del 9 al 10 de agosto, a la una de la mañana, con la subida de Celedon. Todo el mundo se reúne a esa hora en la plaza de la Virgen Blanca para despedir al muñeco con paraguas que para muchas personas es más que un muñeco.
Tras la subida, la fiesta no acaba ya que las cuadrillas siguen dándolo todo con las charangas para animar a la gente. Además de las orquestas que hace que bailemos y cantemos hasta altas horas de la madrugada. Después de que Celedón ya esté en la cima de la torre de San Miguel las cuadrillas hacen el entierro de blusa en el que pasean a un integrante de la cuadrilla a hombros hasta la plaza del Arca en donde todo el mundo le espera con velas y le bailan un aurresku, baile típico vasco.
Así que solo queda esperar un año más hasta que Celedón vuelva a bajar para que comiencen otra vez las fiestas.
Para aquellos que se quieran animar a venir el año que viene, aquí les esperamos con los brazos abiertos. Serán unas fiestas que no olvidarán fácilmente.


Aquí os dejo un video del chupinazo de este año para que podáis sentir un poco lo que nosotros sentimos.

Un saludo a todos

"Todo el mundo necesita un paraguas bajo la lluvia"

Leyre Mateos Díaz